No escuché convocatorias al debate, mesas de análisis ni pronunciamientos de Centros de Estudiantes de las universidades públicas ni privadas aludidas por mis comentarios sobre el avasallamiento de la Justicia que està llevando adelante el Gobierno Nacional y el enorme peligro que eso supone para la republica, el federalismo y la democracia.
No escuché un repudio por un Senado que sanciona una cuestión que debería llevar meses de debates en tan sólo unos días.
No se ha organizado ni siquiera una mesa de debate en los Servicios de Radio y Televisiòn de la Universidad Nacional de Còrdoba donde se escuchen todas las campanas.
No vi que estas universidades, ni sus cátedras ni sus centros de estudiantes dieran posibilidades de desarrollar sus tesis y contraponerlas a los miembros del gobierno y a los de la oposición.
Tampoco vi el apuro por pronunciarse antes éstas y otras distorsiones que se realizan desde el poder, que sí vi cuando alguien les señala cosas que suceden en sus aulas.
No escuché a los decanos salir a pedir aunque sea un poco de prudencia en ese intento de La Campora y los otros grupos k de "ir por todo".
Tampoco los escuché advertir sobre el despilfarro del futbol para todos y la manipulaciòn de sus espacios publicitarios para promover sòlo el relato oficial, ni de la discresionalidad con que se lleva adelante el proyecto de televisiòn digital, ni criticar que se haga un programa de televisiòn partidario (como es 6,7,8) en horario central de la televisiòn pùblica (que es de todos no sòlo de los k) con el dinero de todos (no he visto pronunciamientos desde la Escuela de Ciencias de la Información a esta utilizaciòn grosera de lo pùblico para denostar personas que se oponen al gobierno).No vi desde los especialistas en transparencia y gestión política pronunciarse sobre la afrenta que supone los nombramientos indiscriminados sin concurso, los excesos y corrupciones en las grandes licitaciones, las empresas estatizadas como Aerolìneas o LAFSA (??). No los vì emitir un documento firmado por todos repudiando que la empresa que imprime los billetes no termine de tener dueño conocido ni tesorero o el crecimiento patrimonial de la presidente y su familia, ni exigiendo el juzgamiento de personajes como Jaime ...
No escuchè crìticas en estos medios universitarios al intento de ponerle ròtulo partidario a la ayuda que generosamente damos todos los argentinos (a travès de donaciones o a travès de nuestros impuestos)...
¿Los escandaliza que un grupo de ingresantes no esté de acuerdo con lo que hoy en las universidades les parece un "normal ejercicio de su derecho a bajar lìnea"? A mi me escandaliza que los universitarios no estemos al frente de la resistencia ante semejante corrupciòn y abuso del poder.
