¿De qué deberían hablar primero Schiaretti y Llaryora?



Se presenta una oportunidad única: que el gobernador de Córdoba sea del mismo signo político y se lleve bien con el intendente de Córdoba. Ellos mismos esgrimieron esa razón como la principal para votarlos. ¡Hay que aprovecharla entonces!

¿De qué deberían hablar primero Schiaretti y Llaryora? Hay temas estructrurales que afectan a los vecinos de Córdoba que no han podido ser destrabados en muchos años porque la relación con la Provincia no es buena.
  1. Llaryora debe pedirle a Schiaretti que se haga cargo de todos los Hospitales Públicos que están en la órbita municipal sin ningún sentido, ya que allí se atienden vecinos de muchas ciudades, incluso de otras provincias (y de otros países). Es el caso del Hospital de Urgencia, el Hospital Infantil, el "Principe de Asturias". La salud de mediana y alta complejidad debe ser concentrada en el ambito provincial porque eso es lo más eficiente.

    En cambio, debe pedir que trasladen a la órbita municipal las unidades de asistencia primaria. Aquí conviven los dispensarios municipales con los UPAS provinciales y es más eficiente que estén en la órbita municipal que es la que -supuestamente- mejor sabe cómo trabajar en su propio territorio. Todos los equipos preventivos que trabajen en la ciudad de Córdoba deberían ser de órbita municipal.

  2. Las 37 escuelas municipales deben pasar a la órbita provincial. El número limitado en comparación con la cantidad de escuelas provinciales en el ámbito de la ciudad (más de 500) aconsejan concentrarlas en ese nivel. Tengamos presente que los vecinos invertimos 3.159.019.437 al año para mantener esas estructuras y podríamos utilizar esos fondos para una tarea de educación vecinal más eficiente.

  3. La principal obra que Martín LLaryora debe solicitar apoyo del gobierno provincial es para terminar las cloacas de la ciudad y optimizar el funcionamiento de la Planta de Bajo Grande. Aunque esta tarea es estrictamente municipal, la magnitud de esa obra hace imposible que se pueda encarar sólo con fondos de la Municipalidad. Ya en varios barrios pusieron los vecinos plata y aún así todavía no tienen las cloacas. ESTO ES UNA EMERGENCIA.

  4. Tienen que ponerse de acuerdo quién será responsable la próxima vez que explote un conflicto gremial en el transporte de Córdoba. Aquí eternamente se han echado la culpa los funcionarios municipales, los provinciales e incluso los nacionales (porque el gremio de la UTA es nacional). En esta línea hay que fijar un plan conjunto que combine el transporte urbano con el interurbano que llega a Córdoba.

  5. Schiaretti tiene que asumir la cuestión de la basura de Córdoba, su disposición final que es un tema muy espinoso y otra verdadera emergencia. La solución excede a la ciudad de Córdoba: hay que plantearla para los 14 municipios del Gran Córdoba y la ciudad central. Y hay que dar un salto hacia la separación de residuos y el reciclaje.

  6. La seguridad debe tener decisiones conjuntas entre Schiaretti y Llaryora. Aunque la policía y la Justicia son de órbita provincial, un intendente de una ciudad tan grande como ésta no puede quedar sin arte ni parte, sobre todo teniendo en cuenta el avance del narcotráfico en tantos barrios de la ciudad y el aumento indiscriminado de robos y asaltos estructurados por verdaderas mafias (que a su vez tienen vínculo con el narcotráfico). Deberían abrir la posibilidad de abrir una prueba piloto de una policía municipal que pueda trabajar la prevención y que además debería estructurar un trabajo conjunto con la vigilancia privada que existe en Córdoba y los guardias contratados en ciertos barrios abiertos (AQUI TENEMOS OTRA EMERGENCIA)

  7. Llaryora debe garantizarle a los vecinos, que impedirá que Schiaretti o la provincia quieran avanzar con la implantación de Casinos y slots en el ámbito de la ciudad. De la sota presionó para introducir ese negocio. Y no me extrañaría que volviera a suceder aprovechando la buena sintonia entre ambos niveles de gobierno.

  8. Juntos, Schiaretti y Llaryora deben pedir a la nación que les trasladen los campos de los militares que están entre la ciudad de Córdoba y Carlos Paz. Ese es el futuro de toda la región metropolitana. Y mal manejado o rifado para desarrollos que no contemplen el bien común pueden ser una dinamita para la sustentabilidad de Córdoba.

  9. Juntos también, tienen que lograr que la Universidad (que es de órbita nacional) esté mejor conectada con las necesidad de investigación e interacción con la producción y las empresas de Córdoba. No hablo aquí de un traspaso de competencias porque no sería el caso. Pero sí de una institución clave para Córdoba, que hoy por hoy opera con conexiones muy débiles con la realidad cordobesa.

  10. Por último tienen que ponerse de acuerdo para que las políticas de desarrollo social lleguen a los barrios y a los vecinos en forma eficiente. Hoy la superposición de tareas, programas y equipos entre la nación, la provincia y el municipio en el territorio de los barrios de Córdoba es escandaloso (los únicos que se benefician son los burócratas y los punteros!) A la hora de "bajar" a un barrio -como dicen en la jerga política- Llaryora tiene que asegurarse que estén las cabezas: el ministro de obras y servicios provinciales, desarrollo social, seguridad, salud, trabajo, los fiscales provinciales, algún juez, sus funcionarios provinciales y.... (por favor!) que sea invitada la Sociedad Civil; no sólo las instituciones que son afines a los gobiernos de turno sino todos!.

¿Será posible que gobernador e intendente que son "compañeros" esta vez hablen de estos temas? ¿Será posible que prioricen lo prioritario y no sólo aquellas obras que puedan significar visibilidad (votos) y la posibilidad de algún "recurso para la causa"? Pronto lo sabremos.


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