No estoy activo en la política desde hace 5 años. Pero no puedo dejar de levantar la voz. Porque usted y sus colaboradores se están pasando de vivos. Aprovechando que "nadie le presta atención a lo que se hace en la Legislatura" y mucho menos a lo que tenga que ver con normativas electorales, están trabajando sigilosamente para que las leyes electorales se postren ante sus intereses políticos de perdurar en el poder.
En estos días están intentando reformar una Ley que en su momento, promulgó usted mismo con orgullo (y una fuertísima campaña publicitaria!) y que lo obliga a definir el día de la elección antes del 1 de Marzo. Pero ahora sus legisladores, aduciendo razones ininteligibles, quieren liberarlo de esa obligación para que puedan especular hasta último momento sobre cuándo les conviene hacer el acto electoral. Esta manipulación no tiene nombre! Es hacer trampa ante la narices de todos. Es cambiar las reglas a su favor con alevosía.
Pero aquí no acaba la cosa: están intentando sancionar una ley provincial que permita ser al mismo tiempo candidato a Gobernador y candidato a primer legislador provincial. Esto claramente beneficia a los partidos pequeños como los que yo ayudé a fundar (Primero la Gente) y otros, con la posibilidad de poner a nuestra principal figura en la cancha que más convoca que es la elección ejecutiva a gobernador, sabiendo que luego esa exposición pública puede llevarlos a ser legisladores.
Su objetivo es claro: contrarrestar la debilidad que ya demostró en la última elección perdida la alianza "Unión por Córdoba" que lo llevó al poder, dividiendo a la oposición y a esos puntos que los partidos como el nuestro podríamos aportar a una alianza opositora si nos uniéramos para forzar el cambio en Córdoba.
No se contentan con eso: están sancionando además la entrega de un fondo económico especial para hacer campaña. Fondo que ya existe a nivel nacional y que fue comprometido en la propia reforma que usted sancionó. Pero que hasta ahora era sólo un número exiguo.
No vamos a avalar sus jugarretas políticas Sr. Gobernador. Y no nos vamos a quedar callados viendo cómo las hacen. Hemos peleado cada elección con mucho sacrificio, pero también con dignidad y transparencia (y mucho sentido común!). No deberle nada a la política y haber pasado por ella sin que nos señalen con el dedo (sino todo lo contrario) es nuestro mayor tesoro. Con nosotros no, Señor Gobernador!
¿Por qué sus colaboradores en la Legislatura en lugar de utilizar las horas para configurar este tipo de jugadas maquiavélicas, no se dedican a reforzar los órganos de control de la corrupción, para que no tengamos las sospechas (que todos los ciudadanos tenemos) sobre el manejo del juego en Córdoba, de Epec, de la Lotería, del Banco de Córdoba, del Paicor, de los contratos de obras, de cada licitación, del manejo de la publicidad oficial, de las agencias, de la RAC (la estatización de Caminos de de la Sierras), de Kolector, Miró, Electroingeniería, Odebrecht, la construcción de escuelas, de hoteles casino, de subsidios millonarios dados sin control?
¿Por qué no estudian el modo de disminuir impuestos que están impidiendo el desarrollo de inversiones (y por lo tanto de fuentes de trabajo) como por ejemplo la alicuota de Ingresos Brutos?
¿Por qué no estamos discutiendo como hacer reaccionar la educación pública en la provincia que viene en un lento pero prolongado declive? ¿O cómo convertir el asistencialismo puro y duro que practican en herramientas para que las familias realmente puedan salir de la pobreza?
