BASES FEDERALES para una nación grande / Declaración de Córdoba

Estos son los aportes que desde Primero la Gente hicimos a los equipos técnicos de Macri, para el documento final de la reunión de mañana viernes. Están todos invitados a participar de las exposiciones de los técnicos y de las palabras de cierre de Mauricio Macri.

El evento se desarrollará en la Sede de la Universidad Católica de Córdoba (Obispo Trejo 323), de 16:30 hs a 18:30 hs y la entrada es libre y gratuita.


1. Políticas de Estado para hacer una nación grande

La Fundación Pensar, su Red Federal conjuntamente con el PRO y sus partidos aliados a nivel nacional y provincial, lanzan desde Córdoba una convocatoria nacional para hacer una nación grande, que sea capaz de contenernos y darnos oportunidades a todos los argentinos.

No se trata sólo de una plataforma política para las próximas elecciones. La Construcción de la patria que anhelamos es el desafío que nos convoca y nos motiva y eso exige de parte de todos, grandeza y generosidad para consensuar políticas de Estado. Ya no hay margen para caudillismos mesiánicos. Después de 27 de democracia ha llegado la hora de lograr los consensos y a asegurar el funcionamiento verdadero de las instituciones.

2. Nuestro compromiso con el Federalismo

Creemos en el federalismo. Y por eso hemos elegido a Córdoba, cuna de revoluciones federales, para expresar desde aquí nuestro compromiso con el desarrollo de las diversas regiones del país.

No es posible planificar una Argentina sustentable desde las cuadras que rodean la Casa Rosada. La fuerza productiva de provincias como Córdoba, nos confirman que el nivel nacional tiene hoy la obligación de generar las condiciones para que luego cada región sea protagonista de su propio crecimiento.

Eso nos están pidiendo en todas las provincias: previsibilidad, orden y transparencia desde la órbita federal para que los emprendedores que se multiplican en cada ciudad del país, puedan trabajar con confianza e invertir por el futuro, generando los puestos de trabajo que está pidiendo nuestro pueblo y en especial los jóvenes.

La Constitución Nacional del 53 fue muy clara y muy sabia en este sentido: las provincias son preexistentes, y sólo delegaron en el poder central un cúmulo determinado de competencias, en el marco de un sistema federal que es el más adecuado para que el poder esté cerca de la gente y se respete la idiosincrasia y las potencialidades propias de cada estado provincial.

Sin embargo, una larga historia de distorsiones en el funcionamiento del Estado Nacional y de la democracia ha producido una concentración de poder en el puerto que, a esta altura, y dados los problemas que muestra el Gran Buenos Aires, no deja margen para discutir sobre lo dañino que han resultado.

Nuestro compromiso es construir un federalismo real y no ficticio. Que le brinde a los gobernadores y a los intendentes los recursos necesarios que le son propios, terminando con esta triste historia de manejos discrecionales del poder central.

3. Reformas federales y fiscales.

Para lograr esta misión hay dos desafíos que superar. Por un lado corregir todas las falencias estructurales del sistema federal, avanzando en la sanción de la Ley de Coparticipación, que contemple un reconocimiento especial a los aportes que hacen las provincias agropecuarias del mismo modo que en su momento se reconocieron las regalías petroleras y otros beneficios especiales para provincias no industrializadas.

Necesitamos volver a una distribución de por lo menos el 50 % de los recursos recaudados por la Nación para que vayan directamente a las provincias, sin mediar criterios políticos arbitrarios, ni alineamientos forzados, sólo por el imperio de la Ley y en forma automática.

Somos partidarios de avanzar hacia una transformación del sistema tributario que permita a las provincias ser los agentes naturales de recaudación, para a su vez tributar a la Nación en una especie de coparticipación inversa.

La combinación de estas reformas con una evolución hacia un esquema tributario simplificado, que reduzca la variedad de impuestos distorsivos, producirá una verdadera revolución en la Argentina. Tanto desde el punto de vista de los gobernantes que podrán ser directamente responsables del dinero que aportan sus ciudadanos contribuyentes, como de cada uno de los argentinos que podrán potenciar al máximo el ejercicio de su ciudadanía para controlar a sus gobernantes y participar de las instancias locales donde se toman las decisiones.

4. Nuestra posición respecto a las retenciones.

No podemos dejar de sentar aquí, lo que ya hemos expresado como espacio político a través de nuestros representantes del Congreso Nacional, referentes provinciales, técnicos y partidarios. Es inconcebible que sigamos sosteniendo un régimen confiscatorio de retenciones que están destruyendo ciertos cultivos, actividades agropecuarias y economías regionales, por el sólo afán de recaudar y de mantener el poder de la caja. Urge avanzar hacia un plan de eliminación de retenciones generales y de disminución progresiva de la retención particular a la soja, cuidando que dicho plan no ponga en riesgo las finanzas públicas.

5. Educación, Salud, Justicia y Seguridad

Asegurados los fondos que le corresponden a cada estado provincial, y a su vez a cada municipio, ya no habrá excusas para responder como corresponde a las demandas de los pueblos y ciudades del país por una educación pública de excelencia, una justicia rápida, una sistema de salud eficiente y un servicio de seguridad que pueda garantizar tanto la tranquilidad de las familias en cada barrio y en cada localidad como otras grandes asignaturas pendientes como la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado que ya no admiten más demora.

En este sentido, la tarea que se debe desarrollar desde cada provincia no es menor. No nos resulta indiferente las denuncias que nos acercan las personas que siguen al PRO y a los partidos aliados en todo el país, respecto a la corrupción que se vislumbra en ciertos sectores de los gobiernos provinciales y municipales, así como el clientelismo desenfrenado y el manejo discrecional de la cosa pública para beneficio de un sector político o corporativo.

El hecho de que, a nivel nacional estas conductas reprochables sean tan groseras y desenfrenadas que dominen a la opinión pública, tapando similares irregularidades en los niveles locales, no puede hacernos perder de vista que, el cambio hacia la honestidad de los hombres y mujeres de gobierno, es la principal materia pendiente en todo el país y en todos sus niveles. En este sentido, estamos convencidos que no hay desarrollo económico posible, ni generación de confianza, si la corrupción sigue creciendo como un cáncer a nivel político y social. Combatirla es nuestro compromiso básico y prioritario.

6. Aprovechar las oportunidades que ofrece el mundo

El segundo desafío que nos exigen las provincias es el salto que tiene que dar Argentina para aprovechar las oportunidades que hoy está volviendo a ofrecer el mundo y que esta vez no podemos dejar pasar como lo hemos hecho durante esta década.

El interior, nos reclama y nos grita: ¡basta de intervenir con acciones patoteras como las de Moreno en los mercados agropecuarios y productivos! ¡Basta de distorsionar las variables principales de la economía con manejos discresionales que sólo benefician a amigos del poder como Hugo Moyano u otros de igual calaña!

Necesitamos energía para crecer, caminos y autopistas, necesitamos conectividad a los puertos de Chile, Brasil y Uruguay. Exigimos reglas claras para que provincias como Cordoba puedan enorgullecerse ya no sólo por tener un Arcor, una Aceitera General Dehesa, un Alladio, por citas empresas paradigmáticas en su crecimiento, sino por tener cientos de ellas.

El interior está comprometido con hacer de la materia prima, alimentos y productos industriales para el mundo. Pero la nación debe dar certidumbre y estabilidad política y económica, así como previsibilidad a nivel de infraestructura y energìa. Ese es el compromiso de la Fundación Pensar, del Pro y los partidos aliados y del propio Mauricio Macri.

7. El rol que tiene Córdoba

En estos meses de trabajo con los referentes locales, nos ha quedado en claro la potencialidad de esta provincia. La historia nos demuestra que con gobernadores honestos y capaces como Ramòn J. Càrcano, Amadeo Sabbattini o el Brigadier San Martín, Córdoba puede proyectarse como lo hizo durante aquellas gestiones como el polo metalmecánico y agroindustrial, centro universitario de excelencia, nodo logístico neurálgico, así como de servicios, no sólo de Argentina sino de Sudámerica.

Desde el gobierno nacional nos comprometemos a apoyar los objetivos que tiene Córdoba para convertirse en el puerto seco de la República Argentina, potenciando su Aeropuerto y toda la infraestructura necesaria para lograrlo.

También somos conscientes de la potencialidad del desarrollo del turismo sustentable en la región con el objetivo de posicionar a Córdoba como un polo turístico internacional.

Por último, y no menos importante, asumimos con los cordobeses, el anhelo de que sus sobrados antecedentes universitarios que le han permitido convertirse a lo largo de la Historia en “Córdoba, la docta” sirvan como base para posicionar a la provincia como un motor de investigación y generación de valor agregado a través del conocimiento, profundizando su estrategia de convocar a grandes empresas tecnológicas internacionales a radicarse y buscar en la región sus recursos humanos.

8. Córdoba se merece mucho más

Un párrafo especial para la situación de la Ciudad de Córdoba que es, sin duda uno de los motores del desarrollo de la provincia. Es evidente que la suma de gestiones fallidas ha estancado a Córdoba en las obras y servicios con los que ya debería contar.

La experiencia de gestión en la Ciudad de Buenos Aires, nos indica que la clave pasa, no por intendentes que se vean a si mismos como soldados de presidenta alguna. Se necesita equipos capaces de gestionar las demandas de la ciudadanía.

En este sentido y con toda humildad, ponemos a disposición de los referentes locales los proyectos y los equipos técnicos que han transformado la Ciudad de Buenos Aires para poder trasladar las prácticas exitosas en la medida de las posibilidades.

Córdoba se merece mucho más. No sólo hablamos de sus desafíos inmediatos como son ordenar su sistema de recolección y tratamiento de la basura de un modo sustentable, su sistema de cloacas y de agua, de transporte y de obras para el flujo del tránsito. Sin también de la necesaria proyección de la Ciudad como una de las urbes más importantes de América Latina.

9. Un mensaje de esperanza para todo el país

Agradecemos por tanto a Córdoba por darnos esta oportunidad de transmitir un mensaje a través de sus medios de comunicación de proyección nacional, sus instituciones civiles, y religiosas, y sus miles de estudiantes que vienen de todas las provincias: no podemos contentarnos como estabilidades pasajeras, forjadas a base de intervenciones y de índices engañosos, con la indiferencia ante proyectos autoritarios y totalitarios que benefician a amigos y testaferros, con ese terrible escepticismo del “roba pero hace” que cunde en una parte de nuestra sociedad.

Volvamos a darnos el derecho a soñar una nación grande y a construirla. Sentir que apoyar a un referente como Mauricio Macri no es dar un cheque en blanco. Que tenemos la obligación ya no sòlo de conocer sus planes, sino además de ser protagonistas a la hora de confeccionarlos. Desde aquí, desde Córdoba, y desde cada punto de la República Argentina. Que el próximo gobierno lleve el sello el pensamiento federal que hizo grande a esta tierra. Para terminar con la injusticia de ciudadanos de primera y ciudadanos de segunda, según donde vivas y según cómo se lleve tu gobernador o tu intendente con el presidente de turno.

Llegó la hora de transformar la cosa pública para que vuelva a ser de todos, base del bien común. Esa base que aprovecharon nuestros abuelos inmigrantes y todos aquellos que, trabajando disfrutaron de la movilidad social y vivieron los “beneficios de la libertad”.

La esperanza vence al miedo. Ese es nuestro mensaje federal. Ayudanos a gritarlo desde la Quiaca a Humahuaca, desde Formosa hasta nuestras queridas Islas Malvinas y la Antártida. En cada Barrio, en cada fábrica, en cada pueblo, en cada iglesia, parroquia o templo, en cada ong o institución. La esperanza vence al miedo.

Córdoba, 27 de agosto de 2010.