He tomado una decisión importante (y quiero contárselas)



Queridos amigos:

Se que el regreso del Kirchnerismo al poder ha sido un baldazo de agua fría para muchos de nosotros. Y el sueño de ver un país ordenado, previsible, moderado, moderno, justo, integrado al mundo, se vino a pique. Ver que una mayoría votó a los que nos robaron (del modo en que lo hicieron) y apoya el regreso de un proyecto totalitario con Cristina por detrás, realmente es un shock. 

Esperar, con la sola esperanza de que Fernandez traicione a Cristina y se vuelva moderado, es demasiado poco para lo mucho que queremos este país y todo lo que está en juego para nosotros (nuestros trabajos, familias, el futuro de los jóvenes -nuestros hijos-...)

No me resigno a cruzarme de brazos.
¡Creo que hay motivos concretos para una esperanza mayor que esa! 

No sólo la cantidad de votos a Macri, aún en la adversidad, y que muestra que somos muchos los que apoyamos los valores del cambio. Hay una sociedad que está "en guardia", sensible a la impunidad, al regreso del "relato" a que vuelvan a aparecer, los Moyano, los MIlagros Salas, los Hebe de Bonafini, los D´Elia y los Cristobal Lopez. Sensible a que vuelva el manoseo a la economía y a las instituciones.

El Kirchnerismo está endeble. Siguen con la "picardía" intacta, pero ahora se los ve venir. Los conocemos. Y sabemos sus trucos.

A este tipo de proyectos políticos se les gana en el terreno de la política 

En la primera fase del kirchnerismo costó 10 años forjar una oposición con un candidato unificado que pudiera ganarles. Hoy, tenemos chances concretas de generar un impacto contundente en las elecciones nacionales legislativas del año que vieneY en el 2023 podemos volver a poner en el gobierno un proyecto político superador que haya aprendido de los errores de los últimos cuatro años.

La pregunta es cómo. No hay tantas alternativas. Podríamos decir "hay que fundar algo totalmente nuevo para que no tenga ninguna mancha!" pero eso nos llevaría otros 10 años (por lo menos) con pocas chances de obtener resultados contundentes. 

Podríamos seguir trabajando cada uno desde nuestra covacha, fragmentados, tranquilos porque nadie nos pelea ni nos recela ni nos da la contra, pero políticamente intrascendentes. Eso -en este momento del país- es una necedad. 

La alternativa más relevante (aunque la más difícil) es zambullirse en las estructuras actuales de la oposición y ayudar a construir -o a reconstruir-, corrigiendo las falencias que haya y superando los errores que se puedan haber cometido.

Desde la oposición actual, conformada por el PRO, el Radicalismo y la Coalición Cívica, hay chances concretas de que Argentina no se derrumbe por el desfiladero del populismo otra vez. Y en 3 años retome una senda de racionalidad económica, institucional y política.

Que Macri haya sacado más del 60% de los votos en Córdoba, marca que desde esta Córdoba rebelde, podemos hacer mucho más aún. Hay posibilidades de generar un nuevo hito desde aquí.

¿Qué decisión importante he tomado?

Aunque, como ustedes, "no tengo tiempo". Y aunque arriesgo más que cuando hacía política de joven en los años en que fundaba Primero la Gente (2002), he decidido volver a ayudar en forma concreta. Sin dejar -por supuesto- mis obligaciones profesionales (que llevo adelante con pasión!) voy a aportar mi granito de arena en algo para lo que la vida me preparó desde muy joven. Después de 6 años he decidido volver a comprometerme.

He conversado con Patricia Bullrich -flamante presidente del PRO- y me ha parecido muy valiente lo que ha hecho en los últimos meses. Ella y los principales dirigentes de su partido decidieron dejar atrás la estructura que los había cobijado y meterse de lleno en el PRO. Decidió sumar y no dividir. Fortalecer y no seguir fragmentando. 

Su ejemplo me ha convencido de que hay que hacer lo mismo.Ya no trabajar desde nuestra propia fuerza política -Primero la Gente- sino ayudar desde el PRO a que la oposición crezca y se consolide rápido, en conjunto con el radicalismo y la Coalición. Eso haré en los próximos días. 

Los dirigentes más importantes de la fuerza que fundáramos en el 2002, Primero la Gente me acompañarán en este intento de ayudar. En este "regreso a la política" aunque con otra visión (una visión que ahora tiene canas en la barba!) 

Estoy seguro que casi todos los afiliados de nuestro partido (que yo afilié en persona), nos acompañarán también, porque comparten con nosotros la visión de que vale la pena jugarse, pero en algo que sea útil para el país hoy.

Incluso creo que otros dirigentes de otras fuerzas independientes (que en algún momento conformamos la Unión de Partidos Provinciales) así como gente que querría participar y apoyar al PRO pero no se animaba a meterse, se contagiará y vendrá conmigo a esta "patriada". A todos los estoy invitando formalmente a que hagamos equipo.

Me parece que la oportunidad que tiene Argentina -también Córdoba- merece que nos juguemos en cosas serias. Lo hacemos con la tranquilidad de que no buscamos cargos ni sueldos y que nada nos condiciona.

Lo hacemos por convicción.
Espero que vos, también me acompañes.
Un abrazo,

Sebastián García Díaz